Nos hemos levantado a buena hora, tras
una noche de sueño corto, lxs caminantes, unxs con un liviano café
con leche amargo, otrxs con algún puñado de cereales y otrxs sin
nada, emprenden el camino a través de la ciudad de Granada en
dirección Maracena.
Los vehículos acaban de recoger y organizar las
viandas y enseres ante la atenta mirada de unos cuantos vigilantes
institucionales uniformados y emprenden la ruta hacia Colomera.
Como uno de lo integrantes de Motril
tiene que realizar un curso de capacitación este fin de semana y
otros llegan para unirse a la marcha coincidimos los caminantes y
vehículos indignadxs en la Estación de Autobuses de Granada.
Los Indignados Marchantes, tras una
discusión sobre la ruta, toman una vía de servicio en la redonda de
Maracena (la otra opción era cruzar Maracena) en dirección
Arbolote, mientras, los vehículos, llenos hasta las cejas, reanudan
su periplo rumbo a Las Dos Torres, parada que se había señalado por
kilometraje.
Al llegar a la cortijada de Las Dos
Torres es evidente que no es el sitio idóneo para acampar y realizar
acciones divulgativas, y aunque hay cercano un acceso al río con un
sitio agradable para parar se decide avanzan hacia Colomera, seis
kilómetros más arriba.
Al llegar a Colomera unos vecinos
informan de los posibles sitios para acampar, organizaciones
alternativas con las que poder ponerse en contacto (Asociación de Mujeres en este caso); se habla con la presidenta de la asociación y
dice que por ella, y seguramente por el resto de las asociadas, no
habría ningún problema, pero que no hay quién pueda abrir el
local, que para eso deberíamos hablar con el alcalde para que busque
a alguien que pueda estar al tanto.
Nos encontramos con Justo Sánchez, el alcalde,
tras explicarle la situación ofrece el campo deportivo, pero al
llegar allí resulta que hay un problema con las llaves de los
vestuarios, el operario no tiene localizada ninguna copia,
(ya no es como antes, cuando el alcalde
tenía las llaves de la ciudad, ahora no tienen ni las de los
vestuarios del polideportivo).
Ante esto se retoma la otra idea
inicial, buscar un sitio cercano y agradable para acampar: hay río y
un precioso embalse, que ahora da gusto verlo, todo lleno, sin tierra
cuarteada...
Buscamos un sitio que nos habian
indicado, una zona cercana a un camping y embarcadero, gracias a la
amabilidad de los gestores del camping nos permiten usar sus terrenos
e instalaciones, aún en acondicionamiento.
Nos avisan que ha habido una caída
y que hay que volver rápido a atender. También había que recoger
unas camisetas que habían serigrafiado para la marcha de Granada,
por suerte el herido solo tiene algún arañazo.
Vuelve el vehículo
al lugar de acampada porque los caminantes, tras su paso por Albolote
y Peligros han parado en el pantano de Cubillas, necesitan agua,
alimentos, y alguno asistencia, se descargan rápido los vehículos y
uno sale rápido con un aperitivo, no da tiempo para hacer comida más
rápida.
En el embalse, la Marcha descansa, hay
baños, sueños y cuando llega el agua y la comida sacia
temporalmente su sed y acumula fuerzas para continuar, cuando se retoma el camino, el vehículo
lleva a los más fatigados, están demasiado cansados para la marcha,
pero pueden realizar labores de difusión para preparar la asamblea
de la tarde, a las 21h en la Plaza de Andalucía de Colomera, el
resto, 25, continuan la marcha hacia las Dos Torres y Colomera, en
las Dos Torres hay manantial de agua, balsa, piscina y algunos
ciruelos junto a la balsa, un baño en la balsa no viene pero que
nada mal (al correr más el agua la balsa está más sana), ya solo faltan seis kilómetros hasta
Colomera, como se hace tarde, el vehículo de apoyo transporta a
algún caminante agotado.
Cuando la Marcha llega a Colomera ya es la
hora de la asamblea, nos reunimos en la plaza y realizamos
una asamblea pública, mayormente participativa por ls integrantes de
la Marcha, que manifiestan su indignación por el sistema político
por: las unánimes subidas de sueldos de los políticos, su
dependencia de la banca, la falta de ética del sector, por los
deshaucios (en Málaga han parado dos y seguirán sindo activos y
sensibles en este tema).
Se comenta la importancia de realizar
asambleas para cambiar las cosas, como herramienta de organización
política, estado natural de organización, viables, y necesarias,
posibles en cualquier municipio, en Colomera.
También se menciona someramente la
problemática del olivar en la zona.
Se acaba tarde, a un compañero le da
un fuerte bajón, hay donación de comestibles y de un colchón para
una compañera que tiene problemas de espalda.
Ya tarde la marcha se dirige al lugar
de pernoctación, se hace una cena rápida, y lxs valientes reposan
como mejor pueden, la ruta de mañana no es segura, por lo menos
Benalua, quizás algo más lejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario